Entre el amor y el capricho

Por: Melvin Lans

“El amor de las canciones románticas y de las novelas, ese amor que te hace delirar y querer estar con esa persona, que no te deja dormir, ni pensar, no es amor, es capricho”, y es verdad, el amor verdadero, se desarrolla con el tiempo a través del servicio, de la entrega, el amor verdadero es equilibrado, no afecta tu cordura, no lastima tu autoestima, no te hace abandonar lo justo, ni apartarte de lo sagrado, te genera seguridad y absoluta confianza, es ese amor que las madres desarrollan por sus hijos, y que ninguna tormenta emocional puede acabar, sin importar, lo que hagan tales hijos, y aunque las formas de expresión físicas sean distintas es el mismo amor en todas las relaciones familiares, incluyendo la de esposos y esposas, hay parejas que aprendieron a amarse con ese tipo de amor, que trasciende a la muerte, y que Dios coronara con gloria, esos esposos son incondicionales, y son capaces de dar la vida el uno por el otro, es ese mismo amor que Cristo nos mostró, el capricho es temporal, pero el amor es eterno".